Utilizar los péptidos de forma eficaz y segura puede ser un proceso confuso que probablemente requiera un poco de práctica y paciencia; esto se debe a que los péptidos no llegan «listos» para usar nada más sacarlos de la caja.

Tu ipamorelina llegará en forma de polvo, por lo que tendrás que combinarla con un líquido de administración eficaz y seguro para garantizar que pueda penetrar con éxito en tu torrente sanguíneo.

Este líquido de administración se presenta en forma de agua bacteriostática. Esta agua está especialmente equilibrada para proteger contra las infecciones, al tiempo que garantiza que el organismo pueda «acceder» eficazmente al producto unido.

Antes de iniciar el proceso de preparación (mientras que el polvo debe mezclarse eficazmente con el agua bacteriostática) necesitarás

Ipamorelina y CJC 1295 sin DAC Stack

El CJC 1295 es un producto eficaz liberador de GHRH que sirve para mantener los niveles de la hormona del crecimiento (incluso cuando ya están elevados, según el mecanismo de acción proporcionado por la ipamorelina).

«DAC» significa complejo de afinidad al fármaco – la razón por la que utilizar el CJC 1295 sin este complejo añadido puede ser beneficioso es que su adición conduce a una liberación más lenta del CJC 1295 en general.

Cuando se administra de este modo, «pulsa» la liberación de GHRH de forma similar a como la ipamorelina «pulsa» la liberación de la hormona del crecimiento. Por tanto, ambas actúan de forma muy sinérgica.

Quienes deseen aplicar ambos productos deben seguir estas directrices:

Cómo reconstituir la ipamorelina

Para «reestructurar» de forma segura tu polvo peptídico, vas a tener que seguir los siguientes pasos; al hacerlo, podrás administrar ipamorelina de forma segura y eficaz.

• Limpia a fondo tanto el vial de agua bacteriostática como los viales de ipamorelina con una toallita con alcohol.
• Saca la aguja de insulina de su envoltorio.
• Utiliza tu aguja de insulina para perforar el vial de agua bacteriostática.
• Extrae 0,5 ml de agua por cada mg de péptido en polvo, luego procede a perforar el vial del péptido y deja que el agua se deslice suavemente por el lateral del vial y se «encuentre» de forma natural con el polvo, «fundiéndolo» así.

Ahora puedes almacenar tus péptidos de acuerdo con las pautas de almacenamiento que se indican en la sección siguiente.

Cómo almacenar tus péptidos

Dependiendo del estado físico de tus péptidos, posiblemente tendrás que alterar ligeramente la forma en que los almacenas.

Esto se debe a que los péptidos reconstituidos tienen ciertas contraindicaciones en cuanto a la forma precisa en que pueden almacenarse (tus opciones de almacenamiento son más limitadas) en comparación con los péptidos no reconstituidos.

Cuando almacenes péptidos no reconstituidos (un péptido que aún está en forma de polvo) debes asegurarte de que:

• Se mantiene alejado de la luz solar directa
• No se conserva a temperatura ambiente más de unas semanas como máximo
• Lo ideal es almacenarlo a una temperatura de – 20 grados centígrados

Cuando almacenes un péptido reconstituido, es crucial que

• Mantenlo alejado de la luz solar directa
• Guárdalo sólo a – 20 grados centígrados

Si sigues estas directrices, es poco probable que tengas problemas al almacenar ipamorelina.

Cómo inyectar ipamorelina

A la hora de inyectarte ipamorelina, puedes elegir entre hacerlo por vía subcutánea o intramuscular. Ambos son totalmente adecuados.

A continuación daremos unas pautas sobre cómo aplicar con éxito la ipamorelina según cualquiera de estos principios.

Cómo inyectar por vía subcutánea

Una inyección subcutánea consiste simplemente en inyectar directamente en la capa de grasa que hay bajo la superficie de la piel; tu aguja debe estar inclinada en un ángulo de penetración de 45 grados al realizar este procedimiento, como se indica a continuación:

Para más información sobre cómo realizar este procedimiento con seguridad, consulta este enlace.

Cómo inyectar intramuscularmente

Este método de inyección consiste en inyectar directamente en el tejido muscular magro: hay varios lugares eficaces, aunque se suele considerar que los más comunes / cómodos son los músculos con mayor superficie (los glúteos y los cuádriceps, por ejemplo).

Debes asegurarte de que tu aguja tiene un ángulo de penetración de 90 grados cuando utilices este método de inyección, como se indica a continuación:

Para más información sobre cómo realizar eficazmente este método de inyección, consulta este enlace.

Si asimilas y utilizas eficazmente la información que se ofrece aquí y en los enlaces proporcionados, es poco probable que encuentres problemas durante la administración.

Debe tenerse en cuenta que cualquier posible usuario de hormonas del crecimiento o esteroides anabolizantes que desee inyectarse también debe cotejar estas directrices con los consejos de su médico de cabecera para asegurarse de que está administrando el producto correctamente.

Éste será el mejor medio de garantizar la seguridad en todo momento.